05 de Diciembre 2015
Con el fin de verificar que los procedimientos de conservación preventiva de las colecciones históricas custodiadas se realizan de manera correcta, la Biblioteca Central y el equipo profesional del Archivo Histórico Vicente Dagnino (AHVD) del Departamento de Ciencias Históricas y Geográficas de la Universidad de Tarapacá, recibió la asesoría por parte de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (DIBAM) para precisar que la propuesta hecha es acorde a los criterios de conservación que se están siguiendo en todo Chile y el extranjero.
La Conservadora del Laboratorio de papel del Centro Nacional de Conservación y Restauración (CNCR) de la DIBAM, María Cecilia Rodríguez, indicó que su visita está directamente relacionada con los procedimientos que el AHVD está siguiendo en cuanto a conservación de sus materiales. “Las colecciones están empezando con algunos procesos de conservación, el archivo está un poco más adelantado y en proceso de equipamiento y adquisición de algunos materiales para hacer carpetas y contenedores; es necesario implementar instrumentos para registrar las condiciones ambientales y ver si los depósitos cumplen las condiciones ideales para contener colecciones históricas. Paralelo a esto, estamos trabajando en la revisión de los distintos materiales que están disponibles para mejorar las custodias”.
Para el profesional del Departamento de Ciencias Históricas y Geográficas, encargado del AHVD, Daniel Castillo, precisó que “La asesoría viene a apoyar procedimientos que desde hace unos años se vienen aplicando en el Archivo Histórico, a través de proyectos que han permitido el involucramiento de especialistas en conservación.”
El Director del Archivo Histórico Vicente Dagnino, profesor Rodrigo Ruz Zagal, destacó que “El contar con la asesoría del CNCR es muy importante, considerando que es la principal institución en materia de trabajo sistemático y serio en conservación de los materiales alojados en nuestras colecciones históricas. Tanto el Archivo, como la Colección patrimonial Wormald, se encuentran insertos en un programa de puesta en valor que involucra su adecuada conservación, pero también su vinculación con la investigación y la docencia de pre y postgrado”.
A lo que agregó, “Contar con colecciones históricas, es un plus que no cualquier Universidad posee y he ahí la razón por preservarlas y eternizarlas; no obstante, también existe la necesidad de vincularlas con la investigación, considerando que el pasado es una ventaja en la medida que éste se estudie y se valore; puesto que el simple acto de mirar el pasado sólo para recordar o conmemorar, raya en la nostalgia. Necesitamos como Universidad realizar ejercicios historiográficos que complejicen el mero recuerdo y problematizar el pasado con sustento documental”, culminó el profesor Ruz.
